3. Ahora bien, si opta por dirigir la atención al cuello, recuerde que no es necesario que el collar sea del mismo material o diseño que las pulseras o los aretes. El estilo ecléctico se impone y la hará brillar, siempre y cuando haya armonía. ¡Atrévase a mezclar!
4. Tenga en cuenta la forma de su cuello al elegirlos. Para las mujeres de cuello corto son las piezas largas, que caen en la línea del pecho o más abajo. Les ayudarán a no acortar la figura.
5. Las de cuello largo pueden usar gargantillas gruesas, piezas más ajustadas o varios collares de distintas extensiones. Si opta por esto último, llévelos con un común denominador: por ejemplo, de un mismo color o de un material similar, como borlas o chaquiras. Más de tres piezas en el cuello es una exageración.